Fecha Noticia: 29/02/2024
La fuerte recaudación registrada en enero hizo que el superávit primario del Gobierno Central -Tesoro Nacional, Seguridad Social y Banco Central- alcanzara un récord en enero en valores absolutos. El mes pasado, el resultado fue positivo en R$ 79.337 millones, frente a un superávit de R$ 78.906 mil millones obtenido en enero de 2023. El superávit aumentó un 0,5% en términos nominales, pero cayó un 3,8% en términos reales, cuando se descuenta la inflación. El superávit primario representa el resultado positivo de las cuentas del gobierno sin intereses de la deuda pública. Tradicionalmente, el mes de enero registra un superávit debido al pago trimestral de impuestos por parte de las entidades financieras. En valores nominales, el resultado de enero es el mejor desde el inicio de la serie temporal en 1997. En valores reales (ajustados por inflación), es el tercer mayor superávit del mes, solo superado por enero de 2022 y 2023. El resultado fue mejor de lo esperado por las entidades financieras. De acuerdo con la encuesta Prisma Fiscal, divulgada mensualmente por el Ministerio de Economía, los analistas del mercado esperaban un resultado positivo de R$ 69,8 mil millones en enero. El resultado primario representa la diferencia entre ingresos y gastos, excluyendo el pago de intereses de la deuda pública. La Ley de Lineamientos Presupuestarios (LDO) de este año y el nuevo marco fiscal establecen una meta de déficit primario cero para el Gobierno Central (Tesoro Nacional, Seguridad Social y Banco Central). Con varias medidas para aumentar los ingresos deshidratadas por el Congreso, el gobierno podría hacer contingencias (bloquear temporalmente) algunos gastos a finales de marzo. Sin embargo, la recaudación récord de enero podría hacer que el gobierno reduzca significativamente el recorte, como dijo recientemente la ministra de Planificación, Simone Tebet. Recetas En comparación con enero del año pasado, los ingresos aumentaron, pero los gastos aumentaron en mayor volumen debido al gasto de Bolsa Familia y Seguridad Social. En el último mes, los ingresos netos aumentaron un 7,6% en valores nominales. Descontando la inflación por el Índice Nacional de Precios al Consumidor (IPCA, por sus siglas en inglés), el aumento alcanza el 3%. En el mismo periodo, los gastos totales aumentaron 11.6% en términos nominales y 6.8% después de descontar la inflación. Si solo se consideran los ingresos administrados (relacionados con el pago de impuestos), hubo un aumento de 6.9% en enero en comparación con el mismo mes del año pasado, después de descontar la inflación. Los principales destaques fueron el aumento de la Contribución al Financiamiento de la Seguridad Social (Cofins), producto de la recomposición de los impuestos a los combustibles, y el aumento en la recaudación del Impuesto a la Renta Retenida, debido a la tributación a los fondos exclusivos, que entró en vigor a finales del año pasado. También contribuyó al aumento el fuerte pago del Impuesto a la Renta y la Contribución Social sobre la Utilidad Neta de las instituciones financieras, cuyas utilidades aumentaron. En relación a los ingresos no administrados por la Receita Federal, las mayores disminuciones se registraron en el pago de dividendos por parte de Petrobras. En enero del año pasado, la empresa estatal había repartido R$ 6,59 mil millones en dividendos al Tesoro Nacional, ingresos que no se repitieron este año. Los ingresos por regalías cayeron en R$ 734,1 millones (-4,2%), descontando la inflación del mes pasado, en comparación con enero de 2023. Actualmente, el precio del barril internacional ronda los US$ 82 luego de haber comenzado el año pasado alrededor de los US$ 85. Gasto Impulsado por el nuevo Bolsa Familia, el gasto en gastos obligatorios con control de flujo (que incluye programas sociales) subió R$ 715,4 millones por encima de la inflación en enero en comparación con el mismo mes del año pasado. También aumentaron los gastos en Seguridad Social (+R$ 2,9 mil millones), la complementación del Gobierno Federal con el Fondo para el Mantenimiento y Desarrollo de la Educación Básica (+R$ 1,5 mil millones) y los gastos discrecionales (no obligatorios) en salud (+R$ 1 mil millones). El gasto en la administración pública federal aumentó un 3,8% después de la inflación en enero en comparación con el mismo mes del año pasado. El aumento se vio impulsado por el pago de órdenes judiciales y otras deudas judiciales a funcionarios públicos, que aumentaron un 27,7% en el año posterior al esfuerzo por liquidar las responsabilidades de la enmienda constitucional que dividió las órdenes judiciales en 2021. En cuanto a las inversiones (obras públicas y compra de equipamientos), el gobierno federal asignó R$ 1,79 mil millones en el primer mes del año. La cifra representa un aumento del 2,8% por encima del IPCA en comparación con el mismo periodo de 2023. En los últimos meses, este gasto ha alternado momentos de crecimiento y caída descontados por la inflación. Hacienda atribuye la volatilidad al ritmo variable en el flujo de obras públicas.
