Beneficiada por la caída de las importaciones de combustibles y compuestos químicos y la cosecha récord de soja, la balanza comercial -la diferencia entre exportaciones e importaciones- cerró noviembre con un superávit de US$ 8.776 millones, anunció este viernes (1°) el Ministerio de Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios (MDIC). El resultado es el mejor para el mes de noviembre y supone un incremento del 41,5% respecto al mismo mes del año pasado, según el criterio de la media diaria. Con el resultado de noviembre, la balanza comercial acumula un superávit de US$ 89.285 millones en 2023, el resultado más alto para el período desde el inicio de la serie histórica, en 1989. Desde agosto, el superávit acumulado ha superado el superávit comercial récord de US$ 61.525 millones de todo el año pasado. En términos mensuales, las exportaciones se mantuvieron estables, mientras que las importaciones se desplomaron en noviembre. El mes pasado, Brasil vendió USD 27,82 mil millones al exterior, un aumento del 0,6% en comparación con el mismo mes de 2022 según el criterio del promedio diario. Las compras al exterior sumaron USD 19.044 millones, una disminución de 11,2% según el mismo criterio. Por el lado de las exportaciones, la cosecha récord de granos y la recuperación del precio del mineral de hierro compensaron la caída internacional del precio de algunos productos básicos (bienes primarios con cotizaciones internacionales). Por el lado de las importaciones, la caída del precio del petróleo, los productos derivados del petróleo y los compuestos químicos fue la principal razón de la retracción. Tras alcanzar un récord en el primer semestre del año pasado, tras el inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania, las materias primas han retrocedido en los últimos meses. A pesar de la subida del petróleo y otros productos en noviembre, los valores siguen siendo inferiores a los del mismo mes del año pasado. El mes pasado, el volumen de bienes exportados subió un 5,1 por ciento, mientras que los precios cayeron un 4 por ciento en promedio en comparación con el mismo mes del año pasado. En las importaciones, la cantidad comprada cayó un 1,8% y los precios medios bajaron un 9%. Sectores En el sector agropecuario, la cosecha récord de cereales pesó más sobre las exportaciones. El volumen de mercancías enviadas aumentó un 46,6% en noviembre respecto al mismo mes de 2022, mientras que el precio medio cayó un 15,2%. En la industria manufacturera, la cantidad aumentó un 5%, con un precio promedio que cayó un 2,2%. En la industria de minas y canteras, que abarca la exportación de minerales y petróleo, la cantidad exportada cayó un 6,5 por ciento, mientras que los precios promedio cayeron un 0,7 por ciento. Los productos con mayor protagonismo en las exportaciones agropecuarias fueron la soja (+76%); frutas y frutos secos no oleaginosos (+81,6%) y animales vivos, excepto peces o crustáceos (+12,2%). En valores absolutos, lo más destacado es la soja, cuyas exportaciones aumentaron US$ 1.178 millones respecto a noviembre del año pasado. La cosecha récord hizo que el volumen de los envíos de soja aumentara un 105,8 por ciento, incluso cuando el precio promedio cayó un 14,5 por ciento. En la industria de explotación de minas y canteras, los principales incrementos se registraron en minerales de hierro y concentrados (+27,5%) y piedras, arenas y gravas (+37,7%). En el caso del hierro, la cantidad exportada aumentó un 5,6% y el precio medio subió un 20,7%, impulsado principalmente por el estímulo a la economía china. En cuanto a los aceites crudos de petróleo, también clasificados dentro de la industria extractiva, las exportaciones cayeron un 7,4%. Los precios medios cayeron un 8,2% respecto a noviembre del año pasado, mientras que la cantidad enviada aumentó solo un 0,9%. En la industria manufacturera, los mayores aumentos se produjeron en azúcares y melaza (+36,8%), harina de soja (+15,3%) y carne de vacuno (+11%). La crisis económica en Argentina, principal destino de las manufacturas brasileñas, también influyó en la caída de las exportaciones de esta categoría. Entre las importaciones, los productos con mayores descensos fueron trigo y centeno sin moler (-30,3%); maíz sin moler, excepto maíz dulce (-40,1 por ciento) y látex y caucho natural (-60,6 por ciento), en la agricultura; petróleo crudo (-35,4%) y gas natural (-11,4%), en la industria de explotación de minas y canteras; y compuestos organoinorgánicos (-46,9%) y válvulas y tubos termoiónicos (-25,4%), en la industria manufacturera. En cuanto a los fertilizantes, cuyas compras al exterior aún se ven afectadas por la guerra entre Rusia y Ucrania, las importaciones aumentaron un 2,7% respecto a noviembre del año pasado. Sin embargo, el crecimiento sería mayor si no fuera por la disminución del 37,7% de los precios. El monto importado aumentó 64,7%. Estimar A pesar de la devaluación de las materias primas, el gobierno pronostica un superávit récord de US$ 93.84 millones, frente a una proyección anterior de US$ 7.<> millones, realizada en julio. Según el MDIC, las exportaciones se mantendrán estables en 2023, aumentando solo un 0,02% y cerrando el año en 334.2 millones de dólares. Las estimaciones se actualizan cada tres meses. Las importaciones caerán 11,5% y cerrarán el año en US$ 241.1 millones. Las previsiones son un poco más optimistas que las del mercado financiero. El boletín Focus, una encuesta de analistas de mercado publicada semanalmente por el Banco Central, proyecta un superávit de US$ 83.05 millones este año.
Fuente: Jornal do Brasil (Brasil)