De acuerdo con La Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz (FEPSC), el reciente incremento salarial que autorizó el Gobierno del 10% al Salario Mínimo Nacional solo beneficiará a 1,1 millones de trabajadores, aproximadamente el 20% de la población económicamente activa, la mayoría funcionarios públicos. “Este incremento beneficia a 1,1 millones de trabajadores y deja de lado a 5,8 millones de trabajadores. Solamente el 20%, de los que gran parte son empleados públicos, son directamente beneficiados, pero el gran perjudicado es el 80% restante”, afirmó Oscar Justiniano, presidente de la federación en conferencia de prensa. De acuerdo con Justiniano, al igual que alertaron otros sectores privados, las empresas no se encuentran en condiciones de cumplir con el incremento salarial, pues ya no generan los mismos ingresos debido al encarecimiento de los costos de producción y la falta de dólares. En ese sentido, considera que se viene una nueva ola de elevación de precios de los productos e insumos de consumo básico. “Cualquier incremento salarial va a ir directamente al precio final del producto (…), no se puede, por ningún motivo en este punto, que los empresarios puedan absorber este incremento, como antes se hacía, con las utilidades de las empresas”, explicó. En criterio del presidente de la FEPSC la situación en estos momentos es mucho más crítica, pues las familias más humildes serán las más perjudicadas por esta “mala decisión”. Por ello, Justiniano propuso la creación de un Consejo Nacional del Salario, el cual trabaje de manera tripartita con el Gobierno, los trabajadores y los empleadores, para que no realice el incremento salarial de “manera unilateral”, como, denuncia, se viene realizando en los últimos años. Además, este Consejo no se centrará únicamente en el tema de los salarios, sino en modernizar el sector del trabajo, con el fin de eliminar la informalidad y adaptarse a cambios que no figuran en la normativa actual, como el teletrabajo, por ejemplo.
Fuente: La Razón (Bolivia)