Fecha Noticia: 08/10/2015
Los análisis de la actualidad económica que realizan los ex presidentes del Banco Central son siempre esperados con atención. Y ayer, en el edificio de La Industria, no fue uno sino tres los ex personeros que expusieron sus visiones sobre las principales variables que definirán el crecimiento local el próximo año.
Y el diagnóstico de los economistas Vittorio Corbo, Carlos Massad y Roberto Zahler no fue muy alentador, ya que coincidieron en que alcanzar una cifra de crecimiento superior al 2% en 2016 será un verdadero reto, en el marco del seminario “Realismo económico: qué marca el termómetro”, organizado por la Sofofa y la UDD.
Todo en medio de un panorama externo algo más deteriorado -especialmente en los emergentes- y un clima interno donde las expectativas de los consumidores y empresarios permanecen en terreno negativo, escenario que estará acompañado de una política fiscal y monetaria menos expansiva.
El pronóstico de los expertos presenta una amplia distancia respecto del 2,75% que proyecta el Ministerio de Hacienda para el PIB del próximo año. Y Zahler, por ejemplo, la calificó de “optimista”.
Para Corbo si Chile no hace un trabajo interno va a crecer menos de 2%. El actual presidente de Santander Chile agregó que las oportunidades están en el área de concesiones y proyectos del sector energético, que actualmente están paralizadas y por eso se debe trabajar en eliminar los “lomos de toro”.
Para Carlos Massad un crecimiento en torno al 2% es razonable. Sin embargo, ve nubarrones en el horizonte, como un posible menor dinamismo del sector construcción, que tras la implementación del IVA el próximo año podría tener un efecto debilitador en la actividad.
La visión de Roberto Zahler también apunta a que conseguir un crecimiento superior al 2% no será fácil dada la situación internacional, aunque descarta una crisis y plantea que no estamos frente a una situación “dramática”. Por lo mismo, dijo que los riesgos de caer en una recesión son “bastante bajos”.
Massad coincidió con este punto, recalcando que no estamos frente a una crisis. “Nosotros seguimos creciendo a pesar de todas las dificultades, a un ritmo algo lento, pero creciendo al final y eso es muy positivo”, aseveró.
Tasa de interés debe subir
Al analizar el panorama de persistente inflación por el que atraviesa el país, los tres economistas coincidieron en dos puntos esenciales: el alza de los precios se debe controlar y el Banco Central debe seguir invirtiendo en su credibilidad ante el mercado.
En esa línea, plantearon que es indispensable una próxima alza en la tasa de política monetaria para evitar un desanclaje en las expectativas, sobre todo tomando en cuenta que, aún con los ajustes, el escenario monetario continuará siendo expansivo, evitando así un impacto a nivel de actividad.
“Yo no veo una subida de tasas dramática, pero sí una para decir que estamos muy preocupados porque la inflación se está quedando arriba por mucho tiempo (...). Una subida de tasas le hace bien al país y al Banco Central”, expuso Corbo.
Según Zahler, el instituto emisor ya ha comprometido mucho verbalmente su decisión de tomar un rumbo “no contractivo pero sí menos expansivo”. “Debiera hacerlo y debiera hacerlo luego, en mi opinión. No son aumentos espectaculares de tasas, pero dan una señal de preocupación”, dijo.
Massad también se mostró a favor de un alza. Cree que ajustes de un cuarto o medio punto no van a tener nada que ver con la lentitud ni va a llevar a un problema de agravar la debilidad de la economía. “Por el contrario, es una señal para que el tipo de cambio baje un poco”, dijo.
Massad llama a retomar mirada de largo plazo
Al hablar de realismo en la economía local, Carlos Massad se mostró preocupado por el foco que se le está dando a la discusión y es que, a su parecer, se ha vuelto cortoplacista y crítica del gobierno de turno, perdiendo totalmente el enfoque de largo plazo que debería tener.
"En Chile destruimos los sistemas que teníamos para pensar en el largo plazo. Teníamos dos grandes instituciones que nos ayudaban en esa dirección: una era la Corfo, que ahora está dedicada a cosas muy valiosas pero abandonó la tarea de pensar en el largo plazo; el otro era Odeplan, que desapareció", dijo.
La raíz de la inquietud de Massad es que actualmente el enfoque de los comentarios es que la economía chilena va a crecer al 2% éste y el próximo año y lo que debería ser realmente motivo de análisis es "qué tenemos que hacer para crecer al 4% ó 5% y ponernos en la tarea de hacerlo".
Como ejemplo, señaló lo que está pasando con el precio del cobre, que a su juicio está volviendo a niveles normales, lo que se podría haber anticipado con un análisis previo de lo sucedido en los últimos 40 años con el precio del metal y así no tomar por sorpresa al mercado. "A mí me gustaría mucho, por ejemplo, ver una información acerca de adónde apuntamos con los cambios en el sistema educacional, cuál es el panorama final que vemos, me gustaría mucho para saber si las medidas que estamos tomando ahora apuntan en esa dirección o apuntan en otra", agregó.
Otro tema que a su parecer necesita una mirada de largo plazo es la fuerza de trabajo del país, la cual está a punto de decrecer "sino lo está haciendo ya". Lo mismo con el tema demográfico, ya que -según sus proyecciones- en 25 años más los menores de 15 años y mayores de 65 (población dependiente) serán el 76% del total, es decir, cada 100 personas va a tener que sostener 176 individuos. "¿Cuánta productividad se necesita para eso y cómo lo logramos? ¿Cuánto capital se necesita y cómo lo logramos?", se pregunta.
"Mi mensaje es, cuando hablamos de realismo económico tenemos que hacerlo en un contexto de mirada larga y no solo en el contexto de lo que ocurre hoy", expuso el ex presidente del Banco Central.
Corbo pide flexibilidad para enfrentar shocks
Para Vittorio Corbo, Chile no merece crecer al 2% dado los esfuerzos que se han realizado anteriormente en materia fiscal y de política monetaria, a lo que se suma un sólido sector financiero.
En su opinión, la economía local ha debido enfrentar un mayor deterioro del escenario externo, pero el freno principalmente responde a un shock interno, "que ha tenido que ver con reformas mal diseñadas que se cambian después con efecto en el ambiente de negocios y eso nos ha afectado más".
Para enfrentar este panorama más desfavorable, asegura que es indispensable una mayor flexibilidad, por ejemplo, en el ámbito laboral. Y no ve un cambio en esa dirección en la reforma propuesta por el gobierno.
En esa línea, recalcó que en la propuesta no se privilegia la búsqueda de un mayor acceso de la mujer al mercado laboral, más adaptabilidad o cambiar las indemnizaciones por años de servicio por un seguro de desempleo más generoso, endureciendo así las condiciones para las empresas. "Cuando se vive un stock tremendo a nivel externo hay que tener flexibilidad y aquí justo tendremos rigidez. Ahí espero que tengamos un poco más de tiempo para discutir eso con más calma, por el bien de los trabajadores y por el bien del país", aseguró el experto.
Asimismo, solicitó despejar las dudas relacionadas con la reforma educacional para disminuir los ruidos internos, ya que anticipó que el período de incertidumbre que se vive actualmente a nivel global a raíz de las dudas en torno al crecimiento de China y al incremento en las tasas de Estados Unidos, entre otros, se extenderá por los próximos dos a tres años y especialmente en los próximos doce a dieciocho meses.
"Chile se ha desacelerado, pero estamos creciendo en torno al 2% y hay muchas cosas afuera que no sabemos para qué lado van, pero lo más probable es que Chile tiene las condiciones para seguir creciendo en torno al 2%. Nos gustaría que fuese más que eso, pero para eso no nos va a ayudar el viento de cola internacional y hay que empezar a buscar factores internos y las autoridades tienen que enfocarse en eso ", señaló.
Zahler exige claridad sobre las reformas
"Este país requiere de reformas importantes en distintas áreas y requiere reformas de verdad y no cosméticas", planteó Roberto Zahler.
No obstante, advirtió que los cambios legislativos que ha planteado el gobierno -más allá de su contenido- presentan errores significativos en el diseño, la implementación y la comunicación de los mismos, "lo que no ha contribuido para nada a mejorar los ánimos y dar claridad". Tampoco cree que lo ha hecho la señal diversa, de freno y aceleración en la agenda de reformas por parte del gobierno.
"Eso yo creo que genera una incertidumbre extraordinariamente grande", subrayó.
En esa línea, puso como ejemplo lo ocurrido con la reforma tributaria, con la discusión por los dos sistemas, los acuerdos entre parlamentarios y que al final necesitará la emisión de una nueva ley incluso antes de ser aplicada por completo la original, lo que calificó como "desastroso".
"Más allá de la discusión de fondo, es natural que se posterguen decisiones de inversión, de generar más empleo y eso indudablemente que ha sido made in Chile, y creo que ahí hay un desafío muy significativo por delante", afirmó.
En el marco de incertidumbre generado por este escenario, Zahler dijo que se hace indispensable poner tiempos a la discusión parlamentaria respecto a las distintas leyes que se están discutiendo, concretamente en la ley laboral que está hoy en debate.
"En lo tributario también aclararlo, para que decir lo constitucional. Dar un marco, una guía de cuáles van a ser los hitos de la discusión constitucional o las proposiciones que va a ser el gobierno al respecto, cuál va a ser el timming", manifestó.
En su opinión, que la incertidumbre esté presente en estas variables puede ser peor que tener una noticia mala para un sector en particular, que podría ser el empresarial, ya que "es mejor saber a qué atenerse que no saber". Y añadió: "No estoy en contra de las reformas ni digo que el gobierno tiene que diseñar políticas contrarias, pero debe tener y dar más claridad sobre el punto final de llegada y los momentos y gradualidad y proceso a través de los cuales piensan llegar", concluyó.
