Fecha Noticia: 22/10/2014
Una vez definida la elección presidencial en Brasil, a favor de Dilma Rousseff o Aécio Neves, el nuevo gobierno deberá replantear el papel de la economía brasileña dentro del Mercado Común del Sur (Mercosur). Si bien Brasilia no tiene porqué abandonar este bloque, sí deberá mirar a la Alianza del Pacífico como oportunidad de negocio para sus empresas, más no como una iniciativa que se muestre adversaria al Mercosur.
La década dorada de exportaciones de materias primas procedentes de América Latina hacia China “terminó, quedó en el pasado” y por tanto, las economías lideradas en la región por Brasil como principales socias del gigante asiático deberán optar por la integración y la apertura hacia nuevos mercados, como ya lo han hecho Chile, Colombia, Perú y México, consideró Elías Selman, economista y fundador de la revista AméricaEconomía.
"Los vengo a deprimir, la década dorada acaba”, dijo Selman tras inaugurar el IV Foro de Multilatinas. La economía china crece a tasas del 7% promedio anual y estimaciones de los mercados indican que China reportará un crecimiento del 3.9% promedio anual en las siguientes dos décadas, cifra que obliga desde ahora a las economías proveedoras de commodities a desarrollar nuevas áreas de negocio en las que puedan desempeñarse sus empresas.
Particularmente para Brasil, comentó Elías Selman, “la economía (brasileña) ha estado muy cerrada” y por mucho tiempo apalancó sus exportaciones en las materias primas, y atendió poco a empresas de otros sectores económicos que cuentan con el potencial de convertirse en Multilatinas, compañías con una facturación anual de más de 250 millones de dólares.
Alrededor de 400 firmas brasileñas tendrían el potencial de convertirse en empresas Multilatinas y su rango de acción tiene un alcance de 55 naciones, en su mayoría ubicadas en América Latina.
La economía brasileña se expandirá un 0.3% durante el 2014, estimó el Fondo Monetario Internacional (FMI) al comenzar octubre, un crecimiento todavía menor al 0.7% previsto por el banco central brasileño, que a su vez ya había realizado a lo largo del año una serie de ajustes a la estimación de crecimiento de Brasil.
“Brasil deberá hacer algo; tengo fe en que cambiará de visión. El lado del Atlántico es muy heterogéneo. (Brasil) tendrá que voltear a la Alianza. De alguna manera su política de puerta cerrada no está funcionando. El Mercosur no está dando ahora lo que esperaban. Veo a Neves más cercano (a la apertura). Si (Dilma Rousseff) gana, deberá hacer cambios y uno de esos cambios es abandonar la política de cerrar la economía, la gente está molesta, porque suben más los precios y la inflación”, consideró Elías Selman.
En su conjunto, América Latina debe comprender que parte de su futuro desarrollo se encuentra en el empuje a sectores terciarios, de valor agregado.
El futuro está en la especialización de sectores, en desarrollar nuevas cadenas de valor. “En Perú, industrias alrededor de la minería”; en Brasil, en sectores que giren sobre las materias primas.
“(Durante la década dorada) se decía que los precios (de las materias primas) iban a seguir por mucho tiempo y que China no va a disminuir su crecimiento, pero todos los países tienen un límite de crecimiento y China ya está creciendo al 7% (desde un 9%), y la peor noticias, es que China va a crecer 3.9% en los próximos 20 años, según la consultora Lawrence Summers. Es una pésima noticia para el petróleo de Venezuela, para el cobre chileno y para las materias primas de Brasil”.
Una desaceleración de cada punto porcentual de la economía china repercutiría en una caía del 0.34% de la economía chilena y del 0.05% para la de México, las dos economías más abiertas de la región y con mayores posibilidades de hacer frente a la desaceleración china, estimó Elías Selman.
Una de las claves del progreso latinoamericano está en la integración. Los factores a favor son más que los que significan la contra. El continente lleva cien años sin enfrentar conflictos bélicos entre sus naciones, la identidad religiosa es la misma o similar en toda la región y sus 600 millones de habitantes comparten además los mismos idiomas.
“No quiero decir que no se produzcan más materias primas, pero hace falta integración. Tenemos más ventajas con la integración. Hay problemas, sí. Argentina está en crisis; algo pasa con Argentina, era un país más desarrollado que Australia, Canadá o Italia y ahora… En Venezuela algo va pasar, no que corran a Maduro, pero la situación es difícil. Y en Bolivia, Evo Morales puede decir lo que quiera, pero las cosas andan, la inversión llega y hay empleo”.
“América Latina tiene muchas ventajas en relación con otras regiones; tenemos valores compartidos. La democracia ya es lo de acá. Se ha optado por el camino de la apertura, es una señal que recibe bien el mercado. En Brasil, gane quien gane, la gente querrá más apertura. Falta (en la región) un Estado pequeño, pero fuerte y que regule lo que tenga regular, que promueva la inversión y que empareje la cancha”, comentó Elías Selman.
