Desde hace un año se viene trabajando un acuerdo entre el Ministerio de Industrias (MIPRO) y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) de Argentina para contribuir en el mejoramiento de la cadena de valor de cárnicos. Esta semana se presentaron los resultados de un estudio al respecto, que se enfoca en tres ejes: la sustentabilidad sanitaria, ambiental y económica, a través de acciones como la reducción de los camales y mataderos clandestinos y la constitución de centros de faenamiento en todo el país. Julio Eduardo Malis, director del Centro de Carnes del INTI, indicó que además otras acciones que se deben ejecutar son la implementación técnica adecuada en los centros de faenamiento, las normas de higiene, etc.
El ministro de Industrias, Ramiro González, explicó que el INTI ha facilitado un soporte “espectacular” para que los centros de faenamiento y el manejo de la carne que sale hasta los mercados sean de las mejores condiciones, garantizando la calidad del producto final.
En el año 2009 se determinó la existencia en el país de 12 centros de faenamiento, 180 mataderos y un sinnúmero de camales en su mayoría clandestinos, que se pretende reducir a 26 nuevos centros de faenamiento en los que intervengan los Gobiernos Autónomos Descentralizados, además de la posibilidad de que también haya implementación de la empresa privada.
Los avances
Según los resultados del estudio realizado, se logró la reducción en un 17% de las enfermedades producidas por el mal manejo de la cadena de frío de las carnes. Malis explicó que es importante que se desarrolle esta cadena en el momento de la transportación para preservar la carne de la contaminación. Esto además permite el acceso a mercados más lejanos y garantizar la salud del consumidor final.
Se determinó que hay un incremento en el país. En 2009 el consumo per cápita de carne bovina fue de 9,2 kilogramos y de 8 kilogramos de la porcina, el mismo que subió en la actualidad a 14,4 kilogramos y 10,12 kilogramos respectivamente. (ABT)
En poco, libres de aftosa
Un punto a favor para el faenamiento de ganado ecuatoriano es que para mayo de 2015 se estaría alcanzando la certificación de que el país está libre de fiebre aftosa. Según datos de Agrocalidad Ecuador lleva 34 meses sin brotes, por lo que se considera controlada la enfermedad. Diego Vizcaíno, director de Agrocalidad, explicó que actualmente se está preparando la documentación para solicitar la certificación a la Organización Mundial de Salud Animal (OIE por sus siglas en inglés) que estaría lista en un año. Durante este tiempo, técnicos de la organización harán una visita al país para verificar la información remitida.
Pese a que el certificado no se ha entregado aún, este no es un limitante para que países como Rusia, Colombia, Venezuela e Irán estén interesados en comprar cárnicos ecuatorianos.